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Si en alguna ocasión al levantar la vista al cielo hemos visto el vuelo de globos aerostáticos, hemos suspirado al imaginar las inigualables vistas que deberían otearse.
O puede que trate de globos publicitarios, una de las acciones comerciales que pasean por los cielos de vez en cuando y que nos dejan con la boca abierta por su majestuosidad.
La historia de los globos aerostáticos tiene origen en la necesidad del hombre de elevarse sobre sus pies y volar. De los variados intentos, como las famosas alas de Ìcaro que darían forma a los aeroplanos, esta nave no propulsada tiene como aliados de primera al aire caliente y al viento.
Pero a pesar de ser uno de los inventos más importantes del ser humano, los globos aerostáticos pronto dejarían de considerarse un medio ni mucho menos de transporte. Tener que contar con muy poca tripulación es la razón por la que ha devenido en un deporte, algunos lo declaran pasatiempo, que cuenta con gran número de aficionados, sobre todo en España, en la ciudad barcelonesa de Igualada. En ella se encuentra la sede del European Ballon Festival, que se celebra cada julio de todos los años y donde se congregan gran número de globos aerostáticos que viajan aquí procedentes de toda Europa.
Comprendiendo cómo funcionan los globos aerostáticos, podemos avanzar que sus componentes son el globo o la vela, formada por piezas verticales cosidas y cuya parte inferior es ignífuga para que no salga ardiendo con la llama del quemador. Suelen llevar 4 quemadores, la cesta o barquilla y el ventilador.
Para manejar los globos aerostáticos sobra decir que son necesarias varias personas, ya que hay que desplegar todo el material primero. El ventilador se utiliza para inflar la vela en tierra hasta que su consistencia puede retener en el interior el aire caliente y se erige en vertical, poniendo en marcha los quemadores.
No es fácil ver globos aerostáticos surcando los cielos de cualquier ciudad debido a los tendidos eléctricos y a la peligrosidad de los centros urbanos. Las zonas cableadas y sumamente densas lo hacen imposible fundamentalmente para el aterrizaje, además de que cualquier suceso imprevisible sería fatal para todos los afectados.
El sistema para que los globos aerostáticos se eleven se ejecuta accionando los quemadores que calientan el aire dentro de la vela, que se expande y una parte sale afuera, haciendo que el peso total descienda y el globo se eleve. Para el descenso, el quemador se apaga y el aire se contrae al enfriarse, haciendo que disminuya la altura. Y que se mantenga en el aire de manera constante, el quemador se enciende intermitentemente.
Como medio publicitario, los globos aerostáticos funcionan en un mundo especial y sobre todo se organizan campañas publicitarias para grandes encuentros deportivos que reúnen ingentes cantidades de público en superficies o muy extensas o muy dispares y dispersas.
Publicidad en una competición de regatas de vela, campeonatos de golf, circuitos de motor y concentraciones de público cuya superficie más despejada frente a su vista es el cielo. Es entonces cuando las empresas de publicidad ofrecen a las marcas el uso de globos aerostáticos en cuyos perímetros figura la publicidad.
Los paseos o escapadas en globos aerostáticos es otra de las actividades turísticas que atraen a muchos aficionados y curiosos. Se llevan a cabo en zonas poco pobladas pero con gran atractivo para el visitante, consiguiendo aunar la belleza de los paisajes con la majestuosidad y la aventura de ver la tierra bajo tus pies.
Es una experiencia que muchas personas desean vivir, ya que la Tierra, vista desde globos aerostáticos, adquiere una belleza extrema por la paz y la tranquilidad que otorga el silencio y la suave brisa.