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El esfuerzo inversor del Ministerio de Educación Cultura y Deportes siempre se inclina del lado del Teatro Real de Madrid, el cual lleva años disfrutando de una mayor aportación en comparación con el Liceo barcelonés.
Entre la temporada 2010 y 2015 el Real recibirá un total de 72 millones del Ministerio. El Real percibe un 68% de las aportaciones del Ministerio, un 25% de la Comunidad de Madrid y un pequeño porcentaje del Ayuntamiento. En cambio, el Liceo tan solo cuenta con un 45% de aportación procedente del Ministerio, mientras que la Generalitat tiene que hacer frente a una aportación del 40%. En cifras esto supone un total de 6,8 millones de euros por temporada como aportación de la Generalitat. El ayuntamiento de Barcelona aporta un 10% y la Diputación un 5%.
El Liceo ha recibido este año 3,8 millones de euros más por motivo de las obras de reconstrucción. Sin embargo, a pesar de esta aportación extra, la aportación del Ministerio al Teatro Real es aproximadamente un 30% mayor que la que realiza al Liceo.
Partidos como CiU o el PSC ya han manifestado su malestar por este desequilibrio entre aportaciones. Se presentó una enmienda en el Congreso y en el Senado, la cual fue rechazada por el Partido Popular, partido que, en cambio, si aprobó la enmienda para aumentar en 300.000 euros la aportación del Ministerio al Teatro Real.
Ambos teatro han sufrido recortes en sus subvenciones públicas. Las aportaciones del Ministerio al Liceo han caído a la mitad desde la temporada 2009/2010. Similar a lo ocurrido con el Real, que en el año 2010 recibió 17,1 millones y en el 2015 será de 9 millones.
Desde la Generalitat apuntan a que el Estado ha disminuido sus aportaciones sin previo aviso, rompiendo los pactos. Además, según explican, el Liceo genera un fuerte retorno al Estado vía impuestos, algo que no pasa con la Generalitat. El año pasado la actividad del teatro Liceo supuso un retorno de 9 millones de euros por ingresos fiscales.