Después de 12 años desde que cerrara sus puertas, el Teatro de la Comedia de Madrid ya tiene fecha de reapertura: septiembre de 2015. Si los plazos se cumplen, la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) podrá presentar una nueva temporada en la que fue su casa desde 1998.
Según Miguel Ángel Recio, director general del INAEM, la principal dificultad en estos últimos años radica en los contratiempos derivados de la consolidación de la estructura. Ello sumado a la dificultad que conlleva trabajar en un teatro situado en una calle tan estrecha y rodeado de edificios por todas partes.
De los 15,72 millones destinados a la ejecución de la obra se han utilizado 14,2, por lo que acabarán quedando 1,52 millones. La obra civil acabará en el primer trimestre de 2015 y la de equipamiento estará lista en verano.
Aunque el teatro se cerró en 2002, según explican los técnicos, las obras no comenzaron hasta 2010. “En 2002 se cerró, dos años después se abrió el concurso de obras y luego el del proyecto”, explican. Una vez licitado el proyecto, empezó el trabajo, marcado por la dificultad encontrada en su estructura. El edificio fue reconstruido en 1915 tras un incendio, utilizando para ello hormigón en lugar de madera y hierro (sus materiales originales). “Trabajar con hierro y madera en mal estado es mucho más fácil que con un hormigón que estaba muy degradado, eso ha generado problemas terribles”, explican los técnicos.
Según los técnicos tan solo queda la ejecución de revestimientos, pavimentos y trabajos de acabado. Un proceso que devolverá la piel a un teatro que parecía condenado a no revivir.
«Justo dentro de un año la Compañía Nacional de Teatro Clásico podrá arrancar aquí su temporada”, añadió Recio, quien además confirmó que la placa de la fachada que recuerda que el teatro albergó el discurso fundacional de la Falange Española seguirá en su sitio.