Todo apunta a que la petición de devolución cursada por Patrimonio Nacional recibirá una respuesta negativa por parte del Gobierno, lo que indica que El Bosco, Van der Weyden y Tintoretto se quedarán en el Museo del Prado, su lugar de residencia desde 1936.
“La decisión está tomada a falta de cerrar dos flecos jurídicos, los cuadros no saldrán del Prado”. “El Gobierno no tiene previsto de ningún modo tocar la colección del Prado, esos cuadros se quedarán en el museo”. Estas son las tajantes declaraciones efectuadas por dos representantes del Gobierno al diario El País.
Al parecer los deseos de José Rodríguez-Spiteri, presidente de Patrimonio Nacional, caerán en saco roto. Unos deseos que incluían cuatro obras: ‘El jardín de las delicias’ y ‘La mesa de los siete pecados capitales’, de El Bosco; ‘El descendimiento de la cruz’, de Van der Weyden; y ‘El lavatorio’, de Tintoretto.
El pasado mes de julio Rodríguez-Spiteri envió una carta a Miguel de Zugaza, director del Museo de El Prado, en la que le recordaba que esas pinturas eran propiedad de Patrimonio Nacional y que su intención era recuperarlas. El destino para estas obras estaba claro: el futuro Museo de Colecciones Reales.
Sin embargo, aunque desde Patrimonio Nacional se sostuvo que la carta había sido enviada, desde El Prado se aseguraba no tener constancia de tal carta. Sin embargo la duda fue resuelta: “Sí que existe esa intención de reclamar por parte de Patrimonio, desde luego”, explicaba un alto cargo del Ministerio de Cultura.
Tanto ‘El jardín de las delicias’ como ‘La mesa de los siete pecados capitales’, ambas de El Bosco, así como ‘El descendimiento de la cruz’, la obra más importante de Van der Weyden, figuran bajo el epígrafe “Obras maestras” en la página web de las Colecciones Reales de Patrimonio Nacional. No obstante estas obras se encuentran en las salas del Museo de El Prado. Curiosa paradoja.